Según se informó, GoldCorp y Teck, empresas de capitales canadienses encargadas del proyecto, presentarían su Estudio de Impacto Ambiental (EIA) al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) a fines de este año.
Una producción anual de 224.000 toneladas de cobre, 269.000 onzas de oro, 1.700 toneladas de molibdeno y más de 3 mil millones dólares en inversión.
Estos son algunos de los números que grafican la dimensión que tendrá Nueva Unión. Proyecto minero ubicado en la Región de Atacama que, según indicó un medio de comunicación, entregaría su Estudio de Impacto Ambiental (EIA) a fines de este año y entraría en funcionamiento en 2022-2023.
La importancia de la iniciativa ha sido destacada por los habitantes de las localidades cercanas, el gremio del sector minero y recientemente por el ministro de Minería, Baldo Prokurica. Autoridad que incluso no ha dudado en destacarla como un ejemplo por incorporar “a su planta, mano de obra local, como señal de compromiso con las regiones y con la inversión local”.
Nueva Unión es un joint venture de las empresas de capitales canadienses Goldcorp y Teck, que está compuesto de los yacimientos Relincho (situado a 60 kilómetros al este de Vallenar) y La Fortuna (la misma dirección pero a 60 kilómetros), los cuales funcionarán como una faena.
Poseerá una sola planta concentradora, una desaladora, además, como forma de reducir su huella ambiental, el depósito de relaves se dispondrá en el sector de la Cuenca del Algarrobal, alejado de la cuenca del Río Huasco.
A través de una correa transportadora, el mineral será trasladado mineral hasta Relincho, lugar donde estará el molino de línea única en el que se procesará lo extraído.
Se estima que tenga una vida útil de 36 años (con potencial para expansión) y que durante sus cinco primeros años de trabajo, se extraigan 224.000 toneladas de cobre, 269.000 onzas de oro y 1.700 toneladas de molibdeno.
Estudio de Impacto Ambiental
Fuentes al interior de la empresa, según se informó a través de un medio de comunicación, señalaron que las empresas encargadas de la operación de Nueva Unión planean entregar a fines de este año su Estudio de Impacto Ambiental (EIA) al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA).
De acuerdo a estimaciones, el SEA tardaría unos 18 meses en revisar el EIA, tras lo cual se podría iniciar la construcción de la infraestructura que acogerá el funcionamiento de Nueva Unión, para finalmente comenzar con sus operaciones en torno al 2022-2023.
Reimpulso de la economía a nivel nacional
Además, de la importante cantidad de material que se extraerá, el proyecto de capitales canadienses ha sido destacado por diversos sectores y en especial por el ministro de Minería, Baldo Prokurica, como una iniciativa que refleja “la confianza que existe en el sector minero al reimpulso de la economía a nivel nacional, y a las señales concretas de reactivación económica y fomento a la inversión, que el nuevo gobierno, del Presidente Sebastián Piñera, apuesta para los nuevos tiempos”.
Asimismo, el secretario de Estado subrayó que “es importante que las nuevas inversiones regionales recojan iniciativas como las de Nueva Unión, de incorporar a su planta, mano de obra local, como señal de compromiso con las regiones y con la inversión local”.
Se estima que el joint venture ofrecerá 4.000 mil puestos de trabajo durante la fase de construcción y 1.400 cuando esta esté operativa.
Fuente: Semanario Tiempo